Excusas, Excusas
Tema:Dándole excusas a Dios - Propio 23 (28) Año A
Objeto:Una invitación
Escritura:"Jesús volvió a hablarles en parábolas, y les dijo: El reino de los cielos es como un rey que preparó un banquete de bodas para su hijo. Mandó a sus siervos que llamaran a los invitados, pero éstos se negaron a asistir al banquete" (Mateo 22:1-3 – NVI).
Miren lo que tengo. Es una invitación a una fiesta. Un amigo mío va a tener una fiesta de cumpleaños y me ha invitado. Miren lo que dice al final de la invitación… dice "R.S.V.P." ¿Sabes lo que significa? (El término "R.S.V.P." viene de la expresión francesa "répondez s'il vous plaît", que significa "por favor responda"). Quiere decir que mi amiguito desea que le conteste la invitación y le diga si iré a la fiesta o no.
Algunas personas que reciben invitación para asistir a una fiesta no desean ir y dan excusas. He aquí algunas de las excusas que pueden dar:
Tiene un catarro muy fuerte y no parece que quiera irse. Creo que vamos a visitar a mi abuela. Nos darán un examen en la escuela y tengo que quedarme en casa a estudiar. Tengo que ir a una práctica de balompié. Mi mamá me dijo que tenía que cuidar a mi hermanito.
El dar excusas no es algo nuevo. Aún en el tiempo bíblico las personas daban excusas. Jesús contó una vez una historia de un rey que hizo una fiesta, pero ninguna de las personas que invitó se presentaron a su fiesta. En la historia de Jesús, el rey estaba haciendo una fiesta en honor a su hijo que se casaba. ¡Como era un rey, y aquel era su único hijo pueden imaginarse lo tremendo que iba a ser la celebración y el tremendo honor que suponía el ser invitado!
Todos los planes habían sido hechos, la comida estaba preparada, las invitaciones se habían enviado. ¡El día de la celebración llegó, pero nadie se presentó! El rey envió a sus siervos a ver dónde estaba la gente y por qué no habían venido a la celebración. Las personas comenzaron a dar excusas indicando lo atareados que estaban.
El rey estaba muy molesto, así que les dijo a sus siervos que salieran a las calle e invitaran a todos los que vieran para que vinieran a la celebración de la boda de su hijo. Ellos hicieron exactamente lo que el rey les dijo que hicieran y la Biblia nos dice que el salón donde se celebraba la boda se llenó de invitados.
¿Tienes idea de quién era el Rey de la historia que Jesús contó? Era Dios. Estoy seguro de que sabes quién es el hijo en la historia. Así es, Jesús.
Jesús te ha enviado una invitación. Encuentras sus invitaciones aquí. (Enseñe la Biblia). La Biblia está llena de invitaciones enviadas por Jesús. Él dice: "El que tenga sed, venga; y el que quiera, tome gratuitamente del agua de la vida" (Apoc. 22:17). Él dice: "Vengan a mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso" (Mateo 11:28). Él dice: "Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque el reino de los cielos es de quienes son como ellos" (Mateo 19:14). Jesús nos ha invitado a venir donde él, y aún, algunas personas siguen dando excusas.
Padre, gracias por Jesús, tu Hijo. Te agradecemos su invitación a venir y recibir el regalo gratuito de vida que Él ofrece. Sin dar excusas, decimos: "¡Sí, Señor, sí!" Amén.